La mamografía detecta el 80% de los tumores en el seno, pero no puede
determinar el 20%, por lo que es necesario recurrir a exámenes complementarios.
La mamografía es un método para la detección del
cáncer, pero no es Dios: no detecta el 20% de tumores que se ubican en los senos. Por ello,
es importante que las mujeres, en especial las que superan los 40 años de edad,
se practiquen exámenes completos: ecografía,
examen clínico, resonancia magnética o mamografía tomosíntesis, que es muy eficaz, aunque estos dos últimos procedimientos cuestan hasta tres veces más que una mamografía convencional.
“El autoexamen también es una medida tan importante
como la visita al médico. En caso se encuentre algún tumor o cuerpo extraño, es
vital acudir a la brevedad a un oncólogo para un mayor estudio del caso”,
señaló el Dr. Milko Garcés, Médico Oncólogo Mastólogo de Clínica San Felipe.
El médico Garcés recordó que solamente el 10% de
los casos diagnosticados de Cáncer de Mama están asociados a problemas
genéticos o hereditarios. El porcentaje restante puede deberse a diferentes
factores, por lo que es importante realizarse controles periódicos.
“En este momento, si bien no existe medidas para la
prevención del cáncer de mama, lo que se puede hacer es detectarlo de forma
temprana acudiendo al médico especialista”, recomendó el mastólogo.
¿Qué pasa si se detecta un tumor canceroso?
Cuando se detecta un tumor a tiempo, el tratamiento
varía según el caso particular, pero básicamente
se hace cirugía, quimioterapia y radioterapia.
La cirugía no siempre implica la extracción de la
glándula mamaria. Actualmente se puede conservar el seno con un procedimiento
quirúrgico llamado Cirugía Oncoplástica,
que permite la reconstrucción inmediata del seno.
“Con este tratamiento, la paciente entra a la sala
de operaciones con mamas cancerosas y caídas, y sale ya sin cáncer, rejuvenecida,
viéndose estéticamente mucho mejor”, señaló el Dr. Milko Garcés.
La Cirugía Oncoplástica busca, mediante técnicas de
cirugía plástica preservar la piel y del complejo areola-pezón para realizar
una reconstrucción inmediata del seno afectado por el cáncer, una vez retirado
el tumor.
“Lo más importante de la Cirugía Oncoplástica para
el tratamiento del cáncer de seno es que permite reducir el impacto en la
autoestima de las pacientes, ya que se evitan cuadros depresivos y más bien se
refuerza su confianza y seguridad”, puntualizó.
0 comentarios:
Publicar un comentario